La Psicología Intuitiva, busca que el proceso de cada uno de los consultantes sea hiperpersonalizado, y de esta forma,  brindar a cada persona las herramientas necesarias para que puedan tomar decisiones con base en lo que ellos necesitan y desean, no en lo que el terapeuta cree que necesitan.

Por lo tanto la consciencia y revisión de sus propios sesgos por parte del terapeuta es vital en el proceso. Pues la finalidad es el bienestar del consultante, tomando en cuenta todas sus realidades de raza, etnia, género, orientación sexual, edad, forma corporal, religión, socioeconomía, lugar de residencia, antecedentes familiares, entre otras. Todas igual de importantes.

De esta forma, una visión incluyente, es pilar fundamental de la Psicología Intuitiva, pues el individuo nunca estará desconectado de la sociedad en la que se desenvuelve, y aunque el trabajo es en individual, la salud física y mental es un tema multifactorial y debe ser tratada como tal.

Así el trabajo en individual consiste en darle al consultante las opciones y las herramientas para que pueda desenvolverse en su medio de la forma más saludable posible, y de esta manera alcanzar un estado de bienestar espiritual, financiero, emocional, intelectual, social, físico y ambiental.

LOS COMPONENTES DE LA PSICOLGÍA INTUITIVA SON:

1 AUTOCONOCIMIENTO: Para poder buscar y proveernos de lo que necesitamos y deseamos, primero tenemos que saber que es aquello que necesitamos y deseamos. Así el conocernos a nosotros mismos es el primero de los componentes de la Psicología Intuitiva. Regularmente solo conocemos lo superficial de nosotros mismo, las capas superiores de nuestra personalidad que generalmente están mezclada con las expectativas y los juicios que nuestra familia y la sociedad en general ha puesto sobre nosotros.
 
Así el Autoconocimieto requiere de un proceso de quitar capa por capa, para llegar a lo profundo, al núcleo de nuestro ser, donde se alojan nuestras verdaderas necesidades y deseos. Con el placer como guía, el viaje hacia adentro es una maravillosa experiencia de descubrimiento. 

2 ACEPTACIÓN RADICAL en la medida que nos vamos conociendo, comenzamos a encontrar algunas cosas que son bastante desagradables, algunas ideas, imágenes, opiniones, recuerdos, juicios, decisiones y hechos que duelen.

El proceso de sanar no puede darse hasta que no haya una aceptación total y absoluta de lo que es, no necesariamente debe de gustarnos, pero dejar de huir y protegernos de lo que es, nos dará la oportunidad de limpiar las heridas y sanarlas. solo de esta manera podemos trasformar el dolor en fuerza, perdón y amor.

De repente, la aceptación suena a «rendirse», pero solo es un paso más en la rehabilitación y la recuperación, pues, es en la observación del cuadro completo y sin juicios que comenzamos a encontrar las respuestas que buscamos.

3 AUTOCUIDADO COMPASIVO todo proceso debe estar acompañado por la consciencia de que tenemos el derecho universal al cuidado, a la atención de nuestras necesidades físicas, mentales, emocionales, sociales, financieras, etc. y a ser tratados con amabilidad y respeto, pero sobre todo, tenemos el derecho y la responsabilidad de proveernos a nosotros mismos con esos cuidados de forma compasiva. Siempre teniendo como prioridad de vida las prácticas y las herramientas que nos permitan sostener ambientes y hábitos nutricios. 

Los procesos recuperación y salud psicológica son largos, y no son lineales. Por lo tanto la permanencia a través del tiempo es de vital importancia para llegar a buen puerto, pues acá es igual de importante el proceso mismo y la meta. Ambos factores merecen la misma atención, el día a día tiene el mismo peso en la salud  que los eventos extraordinarios. Por lo tanto es prioridad, hacer el proceso lo más cómodo, amable, respetuoso y agradable posible.

4 AMOR INCONDICIONAL finalmente, el cuarto de los componentes es la salud, que se refleja en amor incondicional a lo que somos, a lo que hemos vivido, a las relaciones que hemos formado, a nuestros sueños, a nuestros deseos, a todos y cada uno de los actores que nos han acompañado.

El perdón y la paz mental nos permiten reconstruir o construir una vida llena de satisfacciones, en todas las áreas. Nos permiten encontrar los propósitos que serán brújula de nuestro andar por una vida maravillosa.

Y, aunque no existe la certeza de que jamás nos volveremos a encontrara con experiencias dolorosas, ahora tenemos una gama de herramientas hechas a nuestra medida, que nos permitirán, reencontrarnos con  nosotros mismos, y tomar las mejores decisiones para nuestra vida de forma intuitiva y natural.